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Arquitectos: Mark Cavagnero Associates
- Área: 4 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Henrik Kam
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Proveedores: VELUX Commercial, Conwed, NanaWall, New Holland Church Furniture, Vetter Stone
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Esta capilla fue proyectada para una escuela secundaria con sesgo religioso en California. Funciona como umbral liminal y retiro restaurativo. Posado en el límite del Campus de la escuela, el volumen blanco de concreto es un símbolo y un marco espacial.
La capilla fue diseñada para servir a los estudiantes, muchos de los cuales son de bajos ingresos y asisten a la escuela mediante una beca. Aunque pertenece a una escuela católica, fue considerada como un espacio espiritual que invita a los desafíos y dificultades de los jóvenes para ser considerados y procesados en un espacio sagrado, silencioso y lleno de luz.
Los materiales utilizados son honestos -concreto blanco, vidrio, calcario Alabama y roble blanco americano- y establecen el tono de un espacio dedicado a la tranquilidad de estudiantes y docentes, que de otra manera sería bullicioso, ruidoso y abrumador.
Mark Cavagnero Associates consideró que la capilla era un "proyecto de ensueño" para la oficina, que a menudo funciona en proyectos institucionales y comerciales de mayor escala y cuyos arquitectos de proyectos disfrutaron la oportunidad de trabajar a una escala tan íntimamente emocional.
La misión de la escuela de servir a los desatendidos y de trabajar para brindar un sentido de seguridad, calma y comodidad a sus estudiantes se ha transformado aquí en un espacio que funciona como un viaje de la vida cívica a la restauración interior. El ingreso a la capilla se hace por la parte posterior, el enfoque sigue la articulación suave de una pared blanca de bloques de concreto vertida a la perfección. Desde este camino, el acceso visual a la capilla se insinúa a través de un muro de acristalamiento y se define por una gran pantalla de madera.
Un pequeño patio abraza la entrada a la capilla; un contemplativo lecho elevado descansa cerca de un banco que se enfrenta a la piscina poco profunda al lado de la entrada, un reflejo suave de la luz que marca el umbral. Esta coreografía abierta ofrece un momento de pausa antes de ingresar al espacio litúrgico explícito, una representación de la esperanza del cliente de que las experiencias restaurativas que se sienten dentro de la capilla podrían comenzar a informar la vida cotidiana y el enfoque educativo de los alumnos.
Para este proyecto de escala relativamente pequeña, el equipo de diseño lidió con su deseo de hacer que el espacio se sintiera aún más expansivo, conectado y más grande que su huella física. La forma del techo con un pico alto es tanto icónica como sensible, su forma es un método para celebrar diferentes modos de luz. El juego de luces se convirtió en un elemento central del proyecto, que está tan interesado en los tonos dorados de la mañana como en el difuso resplandor de la tarde.
La capilla está orientada a invitar al pulso energizante de la luz de la mañana, con la luz más suave de la tarde en el espacio mientras los estudiantes, marcando el final de los estudios del día con un momento de introspección, regresan a casa.